Redacción

Salvar vidas pequeñas: la 2ª República y la batalla contra la mortalidad infantil

Fundación Juan Negrín · Las Palmas de Gran Canaria

Este miércoles 11 de junio, a las 19:00 horas, la sede de la Fundación Juan Negrín acogerá una ponencia que nos recuerda una de las grandes gestas silenciosas de la historia de la sanidad pública en España: la lucha contra la mortalidad infantil durante la Segunda República. El encargado de esta cita será el profesor Enrique Perdiguero, catedrático de Historia de la Ciencia en la Universidad Miguel Hernández, cuya investigación arroja luz sobre un episodio crucial de la salud pública española.

La conferencia se enmarca dentro del ciclo de actividades que acompaña la exposición “Vivir sanos y felices. Salud y educación infantil en la 2ª República (1931-1939)”, que puede visitarse en la misma sede (calle Reyes Católicos, 30, Las Palmas de Gran Canaria). Antes de la charla, a las 18:00 horas, los asistentes podrán disfrutar de una visita guiada por la muestra a cargo de sus tres comisarios: los profesores Candelaria González, Antonio Almeida y María Dolores Estévez, de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.

Una república contra la indiferencia

La España de los años 30 arrastraba una de las tasas de mortalidad infantil más elevadas de Europa. Las causas eran múltiples: pobreza endémica, desnutrición, falta de educación sanitaria y una atención médica desigual y deficiente. Sin embargo, el nuevo régimen republicano, nacido en abril de 1931, supuso un cambio de paradigma: por primera vez, el Estado adoptó una actitud proactiva y sistemática para reducir estas cifras.

Como destacará el profesor Perdiguero, uno de los hitos fundamentales fue la creación, ese mismo año, de la Sección de Higiene Infantil dentro de la Dirección General de Sanidad, encabezada por el médico y estadístico Marcelino Pascua. Esta unidad no solo significó un aumento sustancial del presupuesto destinado a salud infantil, sino también un enfoque científico, integral y moderno del problema.

A ello se sumó la creación de la Sección de Higiene Social y Propaganda, responsable de campañas educativas y preventivas orientadas a la población general. Carteles, folletos y conferencias populares divulgaban normas básicas de higiene, lactancia, vacunación y prevención de enfermedades. El objetivo no era solo salvar vidas, sino también formar ciudadanos más conscientes y responsables.

Educación, salud y república

La exposición y la conferencia del profesor Perdiguero invitan a reflexionar sobre un periodo breve pero intenso, en el que la salud pública se concibió como una herramienta de justicia social. Bajo el lema “Vivir sanos y felices”, la muestra recorre, con material gráfico y documental de la época, los avances en educación sanitaria, la importancia del entorno escolar, la nutrición infantil y la implicación de médicos, maestros y familias.

La entrada tanto a la visita guiada como a la conferencia es libre hasta completar aforo. Un viaje al pasado que, más allá de la nostalgia o la memoria histórica, nos interpela desde el presente: ¿cuánto valoramos hoy la salud pública? ¿Qué lecciones podemos aprender de aquel impulso reformista y su apuesta decidida por proteger lo más vulnerable?

El miércoles, la Fundación Juan Negrín abre sus puertas no solo para mirar hacia atrás, sino también para recordar que los grandes cambios, incluso en los tiempos más convulsos, empiezan por gestos tan esenciales como cuidar la vida desde sus primeros días.